El nombre del Viejo Almacén trascendió por el mundo entero siendo el reducto tanguero más tradicional de Buenos Aires, ubicado en el casco histórico de la esquina sin ochava de Balcarce e Independencia, rincón que oculta el alma de la misteriosa Buenos Aires, conservando como ningún otro las huellas de la ciudad vieja en el Barrio de San Telmo.
El tango e el local alcanza características que parecen imposibles de albergar. Desde hace más de dos siglos, los muros del antiguo almacén atesoran secretos del arrabal porteño: penas de amor, traiciones, sueños imposibles que en los acordes de una orquesta se dispersan entre las mesas y se escucha un tango canción y bailarines giran en un abrazo cómplice.